En el vertiginoso y cambiante panorama empresarial, el liderazgo ya no se trata solo de tomar decisiones estratégicas y gestionar equipos de manera efectiva. La era digital ha inaugurado una nueva era de liderazgo, donde ser un jefe exitoso implica más que solo experiencia en un campo específico. Hoy en día, se requiere una mentalidad abierta, adaptabilidad y disposición para aprovechar el potencial que la tecnología, particularmente la inteligencia artificial, aporta al juego
El Liderazgo Digital no consiste en ser un experto en todas las áreas digitales. Se trata más bien de tener conciencia de las posibilidades, algo de habilidad y, sobre todo, disposición para perseguir nuevas oportunidades y saber potenciar las buenas cualidades del equipo.
Según Ana Sarmiento, experta en evaluación y desarrollo de Liderazgo de Kincentric, «el papel del líder en el Liderazgo Digital es tan, o incluso más, crucial que su competencia en tecnologías digitales. Su rol es impulsar una cultura digital, ser un agente de cambio y aprovechar la tecnología para mejorar la experiencia de todos los grupos de interés».
Existen cuatro aspectos del Liderazgo Digital en los que se deberían de asentar cualquier liderazgo empresarial.
1. Adopción de una mentalidad digital.
Los líderes exitosos están abiertos a aprender herramientas y técnicas nuevas, especialmente en lo que respecta a la tecnología y sus aplicaciones. Comprenden que ser hábil digitalmente es un proceso continuo de adaptación, que nunca acaba. Este cambio de mentalidad es crucial para identificar formas en las que la tecnología pueda conectarles mejor con sus clientes.
Una mentalidad digital implica estar abierto a la experimentación, aceptar los fracasos como parte del proceso de aprendizaje y buscar constantemente formas de mejorar. Esta mentalidad no va solo de mantenerse actualizado con las últimas tecnologías, sino también de comprender sus implicaciones para el negocio y la industria. Los líderes deben ser proactivos al explorar nuevas herramientas y metodologías, lo que les permitirá tomar decisiones informadas que se alineen con el panorama digital.
2. Fomentar una cultura digital en el equipo.
Los líderes desempeñan un papel crucial en fomentar una cultura digital dentro de sus equipos. Como referentes de autoridad, tienen el poder de dar forma al entorno laboral, haciéndolo propicio no solo para mantenerse al día con el mundo digital, sino para abrirle los brazos. Una cultura digital fomenta la colaboración, la creatividad y la disposición para adoptar nuevas tecnologías. Los líderes deben empoderar a sus equipos para desarrollar estas habilidades, experimentar con soluciones potenciales y ver las oportunidades de crecimiento que traen estos desafíos.
3. Aprovechar el poder de los datos.
Hoy en día los datos están en el corazón de la inteligencia digital y los líderes deben reconocer su valor para tomar decisiones informadas. Incluso, si ellos no analizan los datos por sí mismos, pueden aprovechar la información que estos ofrecen acerca de clientes, empleados y tendencias de la industria.
«Durante muchos años la toma de decisiones ha sido un proceso mayormente intuitivo y esto representa un gran cambio. Los datos que se generan con la tecnología aportan evidencia para corroborar las corazonadas y elegir cursos de acción basados en información contrastable», señala Sarmiento.
Esto por supuesto, requiere de un compromiso de parte del líder para comprender el análisis de datos y utilizarlos para mejorar los procesos, la experiencia del cliente y fomentar la innovación.
4. Identificar oportunidades derivadas de la tecnología.
Esta es una consecuencia de aplicar los tres puntos anteriores. Al transformar su mentalidad, fomentar una cultura digital y dominar el uso de datos en iniciativas concretas, les permite identificar oportunidades para sí mismos, sus equipos y la empresa.
La IA, como una de las herramientas poderosas disponibles, puede ser aprovechada para automatizar tareas rutinarias, analizar conjuntos de datos extensos y descubrir ideas que pueden no ser evidentes mediante métodos tradicionales.
Los líderes digitales pueden guiar a sus equipos para identificar áreas donde la IA puede generar cambios transformadores, llevando a una mayor eficiencia, ahorro de costos y mejoras en los procesos de toma de decisiones. «La Inteligencia Artificial puede aportar mucho al trabajo, pero si ni el líder, ni el equipo están dispuestos a considerarla como parte del equipo, a aprender a usarla o a sacar provecho de los resultados, se quedará en un simple tópico de conversación para eventos sociales», apunta Ana Sarmiento.
En conclusión, convertirse en un mejor líder dentro de la compañía de mano de la IA requiere un enfoque holístico del liderazgo digital. No se trata solo de adquirir habilidades técnicas, sino de cultivar una mentalidad digital, fomentar una cultura digital, aprovechar el poder de los datos y utilizar la tecnología para descubrir nuevas oportunidades.
El papel del líder es fundamental para impulsar estos cambios, ya que establecen el tono para el enfoque de la organización hacia el panorama digital. Abrazar estos principios no solo hará que los líderes sean más adaptables ante los avances tecnológicos, sino que también posicionará a sus equipos y negocios para un éxito sostenido en la era digital.
Fuente Comunicae